(Fotografía: Migrantes cruzan el Río Bravo para entregarse a la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos para solicitar asilo en El Paso, Texas. © Reuters)
Lo publicado en esta entrada, al igual que lo publicado en este blog es una opinión netamente personal. En Proyecto:Migración, mi tema menos favorito es la política pero, lamentablemente a veces toca abordar este tipo de tópicos cuando suceden ciertos acontecimientos.
La siguiente noticia, la redactaré de dos maneras distintas para que cada uno saque sus conclusiones:
1.
Durante esta semana (a partir del día 12 de octubre de 2022) el gobierno de Estados Unidos, a través del Departamento de Seguridad de Nacional, tomaron la decisión de restringir la entrada a los ciudadanos venezolanos que ingresan de manera irregular, tan solo en agosto de 2022 las autoridades fronterizas detuvieron (léase DETUVIERON) a 25,349 ciudadanos venezolanos y en lo que va de año, sobrepasan los 150,000 migrantes venezolanos detenidos en la frontera (fuente: Los Angeles Times). Como medida de alivio, Estados Unidos abre un programa en donde 24,000 venezolanos podrán entrar sin necesidad de visa y a través de los aeropuertos -sin ser detenidos- para ello deberán cumplir con rigurosos requisitos entre los que se incluyen: tener una persona con estatus regular en el país quien solicite al Departamento de Homeland Security su ingreso. Esta persona debe demostrar capacidad económica para financiar los gastos del solicitante (estadía, comida, y otros), además de esto, el solicitante no puede tener residencia permanente en un 2do país, ni estar en calidad de refugiado. Entre otros requisitos, el solicitante a este beneficio no puede haber ingresado ni a México ni a Panamá de manera irregular.
2.
Durante esta semana (a partir del día 12 de octubre de 2022) el gobierno de Estados Unidos, a través del Departamento de Seguridad de Nacional, tomaron la decisión de ofrecer un alivio humanitario a 24,000 venezolanos para que ingresen a los Estados Unidos de manera legal por vía aeroportuaria con el fin de evitar el paso irregular de migrantes venezolanos quienes se arriesgan a cruzar de manera ilegal Panamá (y el tan mencionado Tapón de Darien) y de la misma manera, México y su frontera natural al norte a través del Río Bravo.
Tan solo en agosto de 2022 las autoridades fronterizas de Estados Unidos detuvieron 25,349 ciudadanos venezolanos lo cual totalizan más de 150,000 detenciones de migrantes venezolanos en la frontera (fuente: Los Ángeles Times).
Esta medida humanitaria es similar al beneficio migratorio de los ciudadanos de Ucrania, quienes durante lo que va de año huyen desde su país a causa del conflicto con Rusia.
(¿Ves el vaso medio lleno o medio vacío?)
Debo decir que de todos los eventos que esta noticia acarrea, lo único en lo que estoy rotundamente en desacuerdo es con el hecho de que 114 paisanos venezolanos que ya habían cruzado y que estaban siendo procesados en los centros de detención migratoria en Estados Unidos, fueron expulsados el mismo día y dejados a la deriva en México a través del decreto 42 (del que hablo más adelante).
AHORA BIEN,
Es necesario para mí aclarar una de las incongruencias que he visto en las redes sociales derivado de esto, como por ejemplo “cerraron la frontera para los venezolanos”… y con esto no pretendo ni justificar al gobierno de EE.UU. ni mucho menos, justificar ciertos comportamientos de algunos de mis paisanos con lo que tampoco estoy de acuerdo.
Señores… (aclaro la garganta…) La frontera nunca ha estado y nunca estuvo abierta para el paso irregular, de haber sido así, los venezolanos (y demás migrantes) no hubiesen cruzado por las fronteras naturales arriesgando sus vidas en el río, si no por los puentes internacionales (03 de Septiembre de 2022 – Ocho migrantes mueren ahogados al intentar cruzar el río entre EEUU y México).
Lo que sucedía antes del 12 de octubre es que cuando los migrantes venezolanos, cubanos y/o nicaragüenses cruzaban la frontera natural, la policía fronteriza ya los estaba esperando, estos se entregaban y luego eran procesados para que en el transcurso de pocos días fuesen liberados en espera de su cita para la corte de migración y presentar sus casos de solicitud de asilo, PERO; esto no significa que la frontera “estuviese abierta” si no, no hubiesen sido detenidos.
(Cabe destacar que el año pasado, este proceso no tomaba días, podía tomar una buena cantidad de meses, el tiempo de procesamiento fue acelerado debido a que los refugios para migrantes empezaron a coparse).
La decisión tomada por el DHS precisamente abre la frontera para que ahora, los venezolanos puedan entrar de manera legal sin necesidad de una visa PERO cumpliendo con otros requisitos, lo cual (desde mi punto de vista muy personal) puedo decir que es una manera de (a) resguardar la vida de los migrantes venezolanos quienes huyen del régimen del bueno-para-nada que témenos como dictador, atravesando selva, río y una cantidad de obstáculos más y (b) hace IMPERATIVO que haya una PLANIFICACIÓN EFECTIVA a la hora de migrar (tema del que he hablado un sinfín de ocasiones en el podcast, en mis redes sociales y en este blog).
Como digo una cosa digo otra,
Tomando en cuenta que solo en 2022 han cruzado más de 150,000 migrantes venezolanos (esta cifra contempla a quienes cruzaron de manera irregular, esto no cuenta a quienes entraron por puertos y aeropuertos) ¿son 24,000 “cupos” suficientes? NO, PERO; tomando en cuenta que el gobierno de EE.UU. está en el inicio de una recesión técnica, la cual se espera que recrudezca a inicios del siguiente año, esto aunado a la crisis causada por el conflicto Ruso-Ucraniano, es comprensible que el gobierno no abra “el chorro” y vaya a poner un número alto o ilimitado. El poco tiempo que tengo analizando este tipo de temas, me hacen pensar que este será un número inicial, luego -y según cómo fluya este proceso- creo que este número será modificado, de nuevo; esto es una presunción muy personal (como pasó con la decisión de ofrecer TPS para los venezolanos, inicialmente fue por un año y luego se prolongó a un año y seis meses más, medida sobre la cual se benefició un pocotón de venezolanos – con 343,000 elegibles).
“Cerraron la frontera a los venezolanos por showceros. Por grabarse en el Madison Squeare Garden (en Nueva York). Por grabarse atravesando la selva, por abusar de los refugios.”
(etc, etc, etc.)
Los venezolanos somos los únicos seres en este planeta que estando fuera de Venezuela nos culpamos a nosotros mismos de lo que nos sucede y estando dentro de Venezuela culpamos a todos, menos a nosotros mismos de nuestras propias realidades.
El gobierno de Biden decide aplicar el mentado Decreto 42 (promulgado por Trump en la gestión anterior durante la pandemia) y alega que por cuestiones de salud pública expulsa a los migrantes que ya estaban del lado norte del río… y sí, estoy en desacuerdo con que hayan expulsado a mis paisanos cuando ya estaban siendo procesados, PERO, señores; antes de emitir juicios hay que sentarse a pensar un poquito:
El 8 de noviembre hay elecciones de gobernadores, el partido Demócrata (al cual pertenece la actual gestión) está siendo fuertemente criticado y culpado por la inflación, sus políticas migratorias, entre un mar de cosas más.
El 15 de septiembre, el gobernador de Florida; en una jugada claramente política, utilizó a 50 migrantes venezolanos como carne de cañón y los envió a Martha’s Vineyard, sin decirles a donde iban y con engaños. Martha’s Vineyard es un lugar que es conocido como el “Jardín de los demócratas” donde políticos, actores, actrices y gente con muchísimo dinero van a pasar sus días de verano. El mismo día, el gobernador de Texas, monto a 101 migrantes, utilizando la misma estrategia (engaños) y los manda en dos autobuses a la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris en Washington. (mi análisis sobre este hecho el día que sucedió).
Entonces sumemos:
Recesión Técnica + Conflicto Armado Rusia/Ucrania + Elección de Gobernadores + Movidas Políticas de Gobernadores de Florida y Texas dos meses antes de las elecciones.
Aun así, los mismos venezolanos dicen “esto nos pasa por showceros…” (¿?)
Creo que actualmente es momento de buscar más soluciones y crear menos polémica. No es momento de culpar ni hacer responsable a nadie, ahorita es momento de ser una voz que busque ser escuchada, PERO PARA APORTAR, no para criticar. Ahorita es momento de ver en qué ayudamos y no de emitir juicios de valor que no llevan a nada.